El Tiempo Latino
Montgomery: Latina lanza su candidatura al Concejo
Por Olga Imbaquingo | Especial para El Tiempo Latino
La campaña política en el condado de Montgomery calienta motores. Para algunos concejales, como Nancy Navarro, este es su último período y Natali Fani-González quiere ser elegida como su reemplazo en las elecciones primarias del 28 junio del 2022.
Esta joven mujer, nacida en Venezuela, ya empezó a tocar puertas en busca del voto en zonas densamente pobladas de latinos. Una de ellas es Wheaton, donde tiene afincada su residencia. Fani-González, madre de Tessa y Lucca, desde hace ocho años viene desempeñándose como vicepresidenta de la Junta de Planificación Urbana y Parques del condado de Montgomery.
“Soy la única hispana con un cargo de relevancia en esta oficina por donde pasan todos los proyectos de desarrollo urbanístico. Vivo desde hace 20 años en el distrito al que quiero representar, soy una millennial y siento que las estrellas se están alineando para darme la oportunidad de servir a mi comunidad desde una función política”.
Llegó al área de Langley Park a los 16 años. Esta hija de una madre dominicana y de un padre italiano tiene talento para las matemáticas, pero pronto se apasionó por la defesa de los inmigrantes, desde su puesto en CASA Maryland.
“Mis padres se divorciaron y dejé Venezuela junto con mi madre. A CASA Maryland llegué a pedir ayuda porque éramos pobres e indocumentadas. Allí me guiaron para ingresar a la universidad”, recuerda Fani-González como si eso pasó ayer.
Compromiso con los inmigrantes
Gustavo Torres, director ejecutivo de CASA, acaba de ofrecerle su apoyo personal. “Empezó sus pinitos con nosotros, fue nuestra coordinadora de abogacía en Annapolis y demostró que ser extraordinariamente eficiente. La respaldo porque sé que va hacer la diferencia”.
Torres señaló que este fin de mes se reunirá la junta directiva de CASA. “Allí haré mi recomendación de que apoyemos a Natalí, por ser mujer, por ser latina y porque conoce a nuestra comunidad y ha sido clave en la defensa de nuestra gente”. La ex delegada estatal, Ana Sol Gutiérrez, también la apoyará.
Su virtuosismo en las matemáticas le valió que las fundaciones Rockefeller y Ford le otorgaran becas, pero a ella ya se le había metido el gusanito del activismo social y no tomó la autopista de la ingeniería o la física, prefirió estudiar medicina, pero terminó graduán dose de Goucher College en ciencias políticas y relaciones internacionales. “Mi esposo es el ingeniero”, dice entre risas.
“Cuando desde muy joven te das cuenta de las grandes diferencias entre los que tienen y los que no tienen y cuando aprendes a levantar la voz puedes hacer cambios en tu comunidad.
Empecé cabildeando a favor de los derechos de los inmigrantes y terminé de muy buena gana atrapada”.
Gracias a una subvención de la Fundación Ford fue la latina más joven que trabajó en la defensa de los jóvenes soñadores en Annapolis. ¿Y qué pasó con las matemáticas? “El puesto que ocupo hoy me calza perfecto, soy detallista, miro los planes maestros y los proyectos y allí es donde utilizo mi intelecto con los números”.
Vivienda para los pobres
A ese talento, junto a la experiencia adquirida, piensa darle buen uso a la hora de buscar soluciones a la falta de vivienda económicamente accesible, que respete el ambiente con servicios ecológicamente amigables.
Predica con el ejemplo, cada vez que la Junta aprueba un proyecto de vivienda o comercial insiste en el uso de materiales y tecnologías más modernas, como paneles solares, recolección y procesamiento de aguas lluvias, vías para ciclistas y paradas de buses cercanas.
“Desde 2014 vengo trabajando por viviendas accesibles para quienes tienen ingresos anuales de 14 mil dólares al año. La pandemia demostró que esa es una necesidad básica y que no es humano que vivan dos y hasta tres familias en una misma casa”.
El problema, dice, es que se están construyendo viviendas, pero no para los pobres ni cerca de las estaciones de transporte público y de las zonas de trabajo. A esto ella lo ve como “un obstáculo ambiental, puesto que una manera de combatir el cambio climático es tener comunidades que se acerquen al trabajo, a la escuela, al supermercado o sitios de distracción en buses o en bicicleta, para reducir la dependencia de los autos.
Trabajo y transporte
“Si se quiere ayudar a los pobres, los autobuses deberían ser gratis y eficientes. Los fines de semana y las noches son una odisea para la gente que trabaja en horarios nocturnos. A esto le estoy poniendo mucho corazón y ya empecé a tocar puertas de los latinos, los afroamericanos y los judíos. Las elecciones primarias son las decisivas y me encuentro que muchos latinos habilitados para votar son independientes y eso en las primarias es un voto perdido”.
La seguridad peatonal es otra de sus pasiones, desde el cargo que representa ha venido trabajando para dotar a las calles y avenidas de pasos peatonales, porque las de ahora están diseñadas solo para autos y no para peatones.
Con calles y avenidas más seguras, la población podría acercarse sin riesgo de sufrir un accidente al mercado, la escuela, el centro comercial y de esta forma se ayudaría a reducir los altos índices de obesidad en las minorías afroamericana y latina. Si a esto se suma la oferta de una seguridad alimentaria saludable se estaría atacando problemas ambientales y de salud.
Ella entiende que la pandemia ha cambiado en algo la ajuga de la báscula de urgencias y sin necesidad de desplazar los objetivos de la vivienda, medidas contra el cambio climático y transporte, cree que lo más imperativo es crear empleos.
“La pandemia destruyó las fuentes laborales, por doquier se ve que cerraron los negocios.
Ayudo a repartir comida que Shepherd’s Table ofrece a las latinas en Aspen Hill y solo veo que las colas se han triplicado. Es triste escucharlas lamentarse de la falta de trabajo, por eso crear empleo y con mejores salarios es lo primero”. Casi con seguridad se presentarán más candidatos a al Concejo, pero la primera en patear el tablero es Fani-González.